domingo, 5 de febrero de 2012

El monstruo sabio

Fue el monstruo sabio el que me lo dijo. Fue una vez que descendí al pozo de mágica podredumbre donde suele habitar. Estaba oscuro ese pozo y se podría de sabiduría.

Fue el monstruo sabio el que me lo dijo. Así me lo dijo:

Lo que ocurre, tristemente, es que donde alguien, alguna vez, dijo "Corran", todos entendimos "Escóndanse". Donde la vida nos gritó "Párense", le entendimos "Húndanse". Donde había un letrero que decía "Oportunidad", leímos "Aléjese". Donde nos dijeron "Avancen", escuchamos "Agáchense". Donde nos dijeron que reir es mejorar la realidad, entendimos que llorar es aceptar la realidad. Somos analfabetas de visión, audición y espíritu. Cuando por primera vez sentimos miedo, supusimos que pasaría con odio; porque no hay nada que reafirme más la voluntad que hacer daño a los demás. Donde debimos aprender, nos rendimos; donde debimos callar, gritamos y donde debimos maldecir... guardamos sumiso silencio.

Pero lo que más daño nos ha hecho, es que dijimos "Afecto", donde nuestro corazón y nuestra mente gritaban, incesantes, "paroxismo".
 
AUTOR: JORGE ANDRÉS OCHOA

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